INTRODUCCIÓN
la actualidad, el avance de la tecnología ha impactado profundamente en diversos sectores productivos, entre ellos, el de la confección y el diseño textil. Esta transformación ha traído consigo nuevas herramientas que permiten automatizar procesos, mejorar la calidad de los productos y optimizar tiempos de producción. Una de estas herramientas fundamentales es el software de diseño y bordado computarizado, el cual ha revolucionado la manera en que se elaboran prendas y artículos textiles personalizados. En este contexto, programas como Wilcom y Hengqiang se han posicionado como referentes esenciales para el desarrollo de bordados digitales con alto nivel de detalle y precisión.
Wilcom Embroidery Studio es uno de los softwares más avanzados y profesionales del mercado. Su plataforma ofrece múltiples funciones que permiten crear, editar, digitalizar y simular bordados de manera eficiente. Está diseñado para profesionales del bordado, pero también es una herramienta poderosa en el ámbito educativo, ya que brinda la posibilidad de entender a fondo los tipos de puntadas, densidad del hilo, secuencia de costura y demás parámetros técnicos que intervienen en la calidad del producto final. Además, su compatibilidad con una gran variedad de máquinas industriales lo convierte en un estándar en el sector textil.
Por su parte, Hengqiang es una alternativa más sencilla y accesible, pero no por ello menos funcional. Este software se destaca por su facilidad de uso, lo que lo convierte en una excelente opción para estudiantes que están comenzando a familiarizarse con el mundo del bordado computarizado. Permite realizar diseños básicos y medios, entender el comportamiento de las puntadas y exportar archivos compatibles con diversas máquinas bordadoras. Su bajo requerimiento de recursos también lo hace ideal para su implementación en centros educativos con infraestructura tecnológica limitada.
Incorporar este tipo de software en el entorno escolar técnico no solo promueve el desarrollo de habilidades digitales, sino que también impulsa la creatividad, la atención al detalle y la precisión en el trabajo manual. Además, brinda a los estudiantes una experiencia cercana a los procesos industriales reales, preparándolos para ingresar al mercado laboral con una base sólida y actualizada. A través de la práctica con Wilcom y Hengqiang Hazun, los alumnos pueden transformar sus ideas en diseños textiles concretos, favoreciendo así una educación integral, moderna y alineada con las demandas del sector productivo.
Además, el uso de estos programas en el ámbito escolar permite a los estudiantes experimentar con herramientas que antes solo estaban disponibles en entornos profesionales, lo que reduce la brecha entre la formación académica y las necesidades del mercado laboral. La incorporación de software de bordado en la educación técnica no solo mejora la calidad de los aprendizajes, sino que también despierta el interés por el emprendimiento, al brindar la posibilidad de crear productos personalizados que pueden convertirse en una fuente de ingreso. De este modo, se impulsa el desarrollo de habilidades técnicas con un enfoque práctico, innovador y emprendedor, alineado con las demandas de un mundo cada vez más digitalizado y competitivo.